domingo, febrero 18

HILANDER

¿Por qué no mueres? ¿por qué no simplemente dejas de respirar, y ya? No ves que me hace daño el estado en el que estás. Preferiría verte tres metro bajo tierra yaciendo en un cajón que verte así; no estás muerto, pero tampoco estás vivo, es un estado de coma que mantiene viviente mi maldita ilusión.

Confieso que intenté asesinarte de mil formas, matarte a punta de indeferencia, echarte al olvido, odiándote. Pero no pude. Cuando creí que por fin lo había logrado, esa línea recta y ese sonido suspendido empezó a oscilar cuando menos lo pensaba, ¡carajo!

Ya me estoy haciendo a la idea de que esto seguirá continuando no sé por cuanto tiempo. Los errores se pagan caros.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

(Que por más explícito que sea el título, no me gustó... u_u)

Anda, niña, algo tenemos que hacer... así no se puede seguir. Mirá lo que me acaban de enviar a mi correo-e:

Decíle que se muera y que haga el favor de descomponerse lo más rápido posible.

Igual, no creo que ningún error (por grande que éste sea) merezca tanto castigo como el hecho de enamorarte de alguien y sufrir por él. Naaa..

Mar dijo...

si no muere por su propia voluntad...lo mandamos matar...Tú avisa...y yo le daré una señal a mis sicarios justicieros..


Besos nenita..y no se me ponga mal..Que hay mucho pez en el río.